El Arcángel Zadquiel es conocido como el arcángel de la transmutación y la transformación. Su energía está asociada con el color violeta en sus múltiples tonalidades, como el lila. Este poderoso ser trabaja profundamente desde el interior, conectando con la glándula pineal, de la cual es su guardián, al igual que lo es de la intuición y ciertos dones espirituales. Zadquiel es un clarificador para los médiums, ofreciendo su asistencia en la transformación de toda energía negativa en positiva.
Transformación del Dolor y Protección en Multitudes
Cuando atravesamos situaciones dolorosas, como el duelo, Zadquiel nos ayuda a transmutar el dolor para hallar la calma. Además, es un arcángel al que se puede invocar en situaciones donde hay grandes multitudes. Su luz violeta nos envuelve, repeliendo energías negativas. Nos brinda su protección ante la envidia de otras personas y limpia nuestra aura de presencias indeseadas como larvas astrales o vampiros energéticos.
El Maestro Interno y la Alquimia Espiritual
Zadquiel nos abre la puerta a descubrir a nuestro maestro interno a través de la transmutación, facilitando el proceso de alquimia interior. Esta transformación puede incluir la búsqueda de aprendizajes de vidas pasadas, a través de la reencarnación, o bien, una alquimia en la vida presente que nos permita convertirnos en una mejor versión de nosotros mismos. El Arcángel Zadquiel nos guía en el tránsito de nuestras sombras hacia la luz, ayudándonos a identificar nuestras partes más oscuras y transformarlas en luz interior.
Alivio para los Trastornos del Sueño
El Arcángel Zadquiel es un aliado importante para aquellos que sufren de apnea del sueño, ronquidos o dificultades para respirar mientras duermen. Invocarlo puede facilitar la transmutación de aquello que no hemos logrado procesar en los planos físico, emocional o mental, promoviendo un sueño reparador y equilibrado. Su asistencia se extiende también al estado de vigilia, fomentando el bienestar tanto físico como emocional.
Protección Energética y Mediación
Zadquiel es especialmente útil en situaciones públicas o de alto estrés, como entrevistas o reuniones importantes. Envolverse en su luz o Llama Violeta ayuda a repeler las energías negativas, la ira y las emociones intensas de los demás. Es un protector ideal para personajes públicos, actuando como un mediador energético. Además, se puede invocar para proteger a los niños del mal de ojo o de las energías densas de personas que los sostienen o cargan.
Conexión con la Amatista y la Glándula Pineal
El Arcángel Zadquiel trabaja estrechamente con la amatista, un cristal que favorece la apertura y limpieza de la glándula pineal. Invocarlo puede ayudarnos a transmutar lo que se ha acumulado en esta glándula, brindándonos mayor claridad y una percepción más afinada. A menudo, Zadquiel colabora con el Arcángel Jofiel, combinando sus energías en un aura violeta y amarilla. Este trabajo conjunto permite que las personas sabias que trabajan con Jofiel aprendan a transmutar tanto influencias externas como pensamientos, limpiando su campo energético.
Sabiduría y Madurez Espiritual
A medida que avanzamos en nuestro desarrollo espiritual con la ayuda de Zadquiel, somos capaces de transformar nuestras propias energías y de compartir nuestra sabiduría con el mundo. Este arcángel nos enseña que, mediante la transmutación, podemos alcanzar una vida más plena y luminosa, sirviendo como faro de transformación y enseñanza para otros.
En resumen, el Arcángel Zadquiel es un poderoso guía en el camino de la transmutación espiritual, ayudándonos a transformar energías negativas, a descubrir nuestro maestro interior y a protegernos de influencias dañinas. Su luz violeta nos acompaña en momentos de dolor, aprendizaje y crecimiento, invitándonos a alcanzar una mayor sabiduría y paz interior.